domingo, 25 de octubre de 2015

La convertibilidad quince años después.

Suelo pensar que la convertibilidad como esquema de ordenamiento o guía económica no fracasó, sino que fracasamos los argentinos.

En todo esquema económico de control gubernamental siempre hay ganadores y perdedores; grupos de poder que aprovechan las circunstancias y la posibilidad de su información privilegiada para generar un paquete de negocios que no siempre favorecen a un conjunto más amplio, sino que terminan esquilmándolo*. El  manejo de más y mejor información como producto de las cercanías tradicionales a miembros estratégicos del sector público, es una obviedad de la cual ya no hace falta mayor precisión. Esto pasó en convertibilidad dado que esto pasó siempre. Sin embargo lo que no es tan obvio -aunque vulgarmente lo parezca-, es la definición que indica que el fracaso de la convertibilidad se haya debido al esquema convertible mismo.

Si recordamos los principios básicos de ese esquema, vemos que su objetivo fundamental estaba apoyado en la búsqueda por mejorar la productividad de la economía Argentina. En paralelo, como es obvio, mejorar la competitividad sobre la base de un esquema que parangonaba la medida interna con la internacional, y anclaba desde un inicio los parámetros de expectativas en simetría a lo largo del tiempo. Era la primera vez en décadas que los argentinos teníamos la chance de medirnos con las mismas perspectivas y proporciones que el resto del mundo desarrollado, y con ello, poder dar de nosotros en más y mejor libertad. A nuestro ritmo, es cierto, pero corriendo en la misma carrera -si se permite el ejemplo-. La convertibilidad nos abrió las puertas a esa posibilidad.

Lamentablemente, entiendo, no fuimos capaces de aprovechar nuestra oportunidad y nos tranformamos en nuestros propios conspiradores; sindicatos luchando cada vez que veían perder su poder de privilegios monopólicos de representación, transformados de manera paradójica más en garantes del "statu quo tradicional" que en motor del cambio para la mejora y la modernización del trabajo. Instituciones sindicales que en lugar de propender a reorganizar el sistema de incentivos y reclamos bajo los nuevos desafíos, hicieron todo lo posible por obturar el avance de la productividad de los trabajadores públicos y privados. También asistimos a una década en donde el nuevo esquema amenazó a la propia corporación política (de ahí que hoy sea una mala palabra hablar medianamente a favor de poner luz a los aspectos positivos de la convertibilidad), la cual percibía una merma de poder relativo en el novedoso entorno. De esta manera una especie de conspiración de pasillo se transformó en un comportamiento cotidiano, y el objetivo de esos tejes y manejes no estaba orientado a la cualidad y la búsqueda de un nuevo posicionamiento en el nuevo esquema, sino hacia la búsqueda de una retracción a la posibilidad de que el nuevo esquema se desarrolle. Hasta Carlos Ménem -el máximo líder político durante la convertibilidad-, conspiró contra el esquema cuando influyó para no reajustar la simetría del mismo, anteponiendo sus objetivos electorales antes que un objetivo de mayor envergadura institucional. No hay que olvidarlo.

También el sistema educativo se congeló y fue reacio -por no decir reaccionario- a implementar los cambios propuestos, y se negaron antes de hacer todo lo posible para ver si se aggiornaban a la nueva era de la información y la tecnología. Los científicos se quedaron más en la puja política interna y no profundizaron la construcción de redes internacionales de conocimiento desde sus entornos de investigación y las nuevas posibilidades (en los 90 se creó La Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica entre otras secretarías y mecanismos que hoy demuestran que la idea con la cual fueron creadas era fértil). Los empresarios en lugar de aprovechar la oportunidad de actualizar sus equipos y capital gracias a la apertura y la posibilidad de obtener los mismos recursos que sus competidores internacionales a iguales precios, también se abocaron a la opción blanda que implica hacer lobbying en los pasillos públicos para evitar el riesgo de invertir con incertidumbre y competir. De esta forma, ese espíritu de empresarialidad tan deseable y esencial como motor de crecimiento y desarrollo -y que debía haber aparecido en ellos en ese nuevo contexto-, nunca apareció salvo honrosas excepciones mostradas por los nuevos empresarios que el esquema coronó en el sector de los servicios y la información, principalmente.

De esta manera y con otras tantas actitudes similares en diferentes sectores, la respuesta de los argentinos al esquema de convertibilidad resultó ser el principal escollo que tuvo que sortear. Y no fue su abrupto final la consecuencia de haber resistido la "conspiración externa neoliberal con ayuda interna" (como recita en forma permanente la vulgata academicista que analiza ese momento), sino la cruda evidencia que puso a flor de piel la imposibilidad de los argentinos de poder estar a medida de la productividad y el desarrollo de los países mas productivos y desarrollados del planeta. Cruda evidencia que nadie desea ver.

Así, luego de 8 años de ingresos por la vía de inversiones en forma sostenida, cuando el proceso se cerró y el flujo comenzó a revertirse -en parte debido a las expectativas generadas mediante los procesos mencionados más arriba-, bastaron unos meses para que se presente el reposicionamiento del conservadurismo vulgar, y todo retrocedió en lugar de avanzar. Los tradicionales grupos de poder volvieron a controlarlo todo haciendo nuevamente las mieles de una arcaica estructura dominante que debíamos haber superado con el esquema convertible. De esta manera solo devino un cambio parcial que pudo evidenciarse en cierto incremento de la capacidad instalada, que luego de la retracción al final de la convertibilidad, quedaría sobredimensionada para la demanda interna, aunque ahora con el triste agregado de una nueva capa de pobreza acrecentada gracias a la rigidez económica que no pudo absorber las consecuencias de la productividad y modernización de una parte de la economía que se había descalzado. La capacidad instalada en exceso que dejó la convertibilidad también sirvió para empujar un ciclo de consumo durante la década siguiente, agotándose durante el segundo mandato de Cristina Kirchner.

Esa pobreza (camuflada durante el gobierno de Cristina Kirchner gracias al consumo que permitió la abundancia de capacidad instalada ganada durante la convertibilidad) no fue creada por la convertibilidad o efecto de tal esquema, sino por los condicionamientos por nosotros generados. Esa pobreza estructural se profundizó durante la convertibilidad porque no pudimos -no quisimos- aprovechar el abanico de posibilidades diversas y de oportunidades que se presentaron. Pero la convertibilidad posiblemente ha dejado una enseñanza que va más allá de lo estrictamente técnico y económico; los conspiradores más eficientes y malévolos, los causantes de nuestra pobreza y nuestras desdichas, hemos sido nosotros mismos. Los argentinos.


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*para quien escribe estas líneas esas formas no representan negocios sino otro tipo de conducta o procedimiento que podríamos definir como "negociados", que no es lo mismo en los términos de mercado que interpreto, en donde un negocio siempre favorece a todas las partes relacionadas.

lunes, 12 de octubre de 2015

Tecnología, producción y cambio estructural.

Altamente recomendables 50 minutos que nos ponen en contexto sobre los cambios a los que estamos asistiendo. No todo es militancia política, cambio climático y guerras en Oriente Medio.


jueves, 17 de septiembre de 2015

INFLACIÓN


El que inunda el mercado con dinero y piensa que la inflación es una "suba generalizada de precios" (de manual), sostendrá que la causa de la misma se encuentra en el empresario que remarca, el arbitrajista que burbujea el pase de manos y el trabajador que intenta cobrar más por su servicio. De esta manera saldrá a perseguir, regular y controlar a los empresarios, a los arbitrajistas y a los trabajadores, sugiriendo los topes a los que cada uno de ellos puede aspirar. Nunca pensará que debido al exceso de papeles, la abundancia de los mismos es la que provoca que éstos pierdan su valor. Pero el mercado no "piensa", actúa espontáneamente como siempre lo ha hecho, y de esta manera, ante ese contexto, reacciona como lo ha hecho a lo largo de TODA LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD: depreciando su interés por el bien abundante, y orientándolo a otro bien sustituto -similar- pero escaso. En ese sentido puede ser otro medio de cambio y reserva de valor, cuanto que también otros bienes de intercambio que comienzan a ser escasos en términos de esos papeles (a ciencia cierta todos los bienes productivos y producidos comienzan a ser escasos en la medida que los papeles son más y más; hasta el pan se transforma en un bien escaso).

La inflación no es una "suba generalizada de precios" sino la caída inexorable del valor de representación del papel de intercambio, por su abundancia en el mercado. Así, quienes ofrecen cualquier cosa, piden más papeles hoy de los que pedían ayer. Y pedirán más papeles mañana. Como el papel conlleva un número, esa mayor cantidad de papeles montan una nominalidad más grande. Por eso, los idiotas que salen a perseguir remarcadores, trabajadores y arbitrajistas, se quedan tanteando en el nivel de la apariencia del fenómeno (la suba de precios) perdiéndose la esencia del mismo (la pérdida de valor de la moneda por su abundancia relativa). Y terminan creando un mercado general de la escasez. Policíaco por la intervención y las persecuciones, señalando siempre un fantasma nuevo que nunca encuentran.


viernes, 11 de septiembre de 2015

Reestructuración de Deuda y Marginalidad.

¿Le prestarías dinero a una persona a la cual sabes que no podrás hacerle una acción legal para cobrarle si ésta no cumple su compromiso? Yo no.


Creo que los únicos que prestan en esas condiciones son esas personas que tienen guardaespaldas y matones a sueldo, que en caso de no pagar te agarran en una esquina y te suben a un auto. Te ponen un trapo en la boca y te llevan a un galpón, en donde te atan a una silla para molerte a palos diciéndote que si no aparece en los próximos días todo el dinero adeudado, la situación se pondrá peor.

Y vos salís de ahí, arrastrándote... Mirando los hermosos edificios de los bancos. Autoflagelándote con la pregunta sobre qué fue lo que hiciste mal que no pudiste calificar en esos lugares para que confíen en ti para prestarte dinero en mejores condiciones. Apenado y dolorido al saber que en la situación que estas afrontando allí te habrían atendido con un café para arreglar el pago en caso de no haber podido afrontar el compromiso por ti asumido, en lugar de tener como primera alternativa la de reventarte la cara a trompadas; tal como lo hace un matón de barrio.

Bueno, te cuento: si continuamos festejando la "patriada" del Ministro Kicillof de ayer en la ONU, vamos a terminar en la desdichada situación planteada en los párrafos anteriores; un país con tendencia permanente al endeudamiento -puesto que en Argentina gastar más de lo que se genera es regla y no excepción-, que termina haciendo todo para no calificar en la cartera de préstamos de las mejore plazas del mundo, termina golpeando las peores puertas para obtener sus recursos. Comenzamos así una relación con los peores prestamistas mundiales -que son como ese señor que utiliza a sus matones-, asumiendo el rol de la contraparte dentro del grupo de grupo de los peores deudores mundiales (Argentina queda en el contexto mundial como el culposo muchacho que anda caminando por las esquinas mirando la bocacalle, asustado y escondiéndose de los matones que sabe, lo andan buscando).

Y así, muy voluntaristas y militantes, lo único que habremos logrado es ya no poder calificar para que nos presten en las mejores plazas y en las mejores condiciones.

Espero haber sido claro en el mensaje.


martes, 4 de agosto de 2015

De cuenteros, explotadores, explotados y acomodados.

Creían que la vida era una eterna lucha de buenos contra malos en la cual estos últimos siempre ganan y los primeros siempre pierden. Creían que con ese resultado se marcaba la tendencia permanente de la historia mediante la cual los malos perpetúan la explotación y el dominio. A los malos los estigmatizaron llamándolos "burgueses", y a los buenos los apañaron llamándolos "obreros". Y así crecieron. Hoy caminan el día a día justificando su propio robo con el cuento que traen desde la cuna. Y se sienten tan importantes que no pueden vivir de un "trabajo obrero" (creen ser la superación de ese rol miserable que detestan para sí), sino que logran acomodarse para vivir del trabajo ajeno, del cual succionan una parte administrando públicamente una historieta, una novela con la cual roban sin que nadie lo perciba. Y así, frotando una farsa fantástica contada en formato histórico, gritan a los cuatro vientos que la lucha es compromiso: compromiso para quitar al malo aquello que corresponde al bueno; extirpar al burgués lo robado para devolver al obrero lo suyo.


jueves, 2 de julio de 2015

Pornografía para todas y todos.

Por estas horas uno de los temas principales que cubre la agenda informativa en Argentina ronda entorno a una puesta en escena que se dio el día de ayer en el área de Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires -UBA-, y que se llama "Posporno".

Por lo que indican las primeras informaciones se trató de un grupo de 5 personas, las cuales tuvieron sexo "heterodoxo" en el hall de la mencionada facultad. La transgresión aparentemente pasó por la utilización de artefactos, formas no convencionales de penetración y complementariedad de género no tradicional. El objetivo, se indicó, fue poner en la agenda de debate la cuestión del género, el simbolismo tradicional de dominación sexual y la mercantilización del sexo en la industria de la posmodernidad. Una especie de denuncia contra el sistema en forma de pretensión artística.

Este tipo de puesta en escena no es algo novedoso, ni por el tema ni por la forma. Gran parte de estas intenciones disruptivas se forjaron en el seno de algunas corrientes de pensamiento -principalmente francesas-, que pretendieron revolucionar el estado de pensamiento imperante en su época para transformarse en una especie de nueva forma de ver el mundo desatada de los lazos y designios de la "lógica del capital", que suponían, imperaba en ese momento histórico. Esas corrientes en nuestro medio recalaron, precisamente, en las facultades de ciencias sociales y en carreras correspondientes a filosofía y letras, sociología y comunicación social. Una de las muletillas fetiche que los distingue se construyó mediante un elemento conceptual "ad hoc" el cual evidenciaba la pretensión de "ir más allá" en el análisis de la realidad -o al menos generar la consciencia de superación del estado presente-.

Aparece así la palabra "post" acompañando toda definición con potencial de ser redefinida para trascender su significado original y ser reconstruida, y con ello, abrir nuevos caminos académicos que puedan ser considerados como prioritarios en la agenda intelectual en tanto nuevos formatos de "análisis críticos". Se establecía así la sensación de estar corriendo la frontera del conocimiento (aunque en realidad era la explictación de la impotencia por lograrlo). Mediante ese proceso asistimos a un bombardeo conceptual que ya ha perdido completamente el rumbo y muestra objetivamente que se trata de movimientos acéfalos en cuanto a las formas de profundizar y sistematizar un análisis de largo aliento que pueda desplazar positivamente el estado del conocimiento del tema particular que abordan, y se revelan ante la propia limitación repitiendo algo que termina siendo no más que un eslogan vacío de contenido. Palabras como posmodernidad, posfordismo, poscapialismo y posconvertibilidad son un ejemplo claro de esta falencia conceptual.

De esta forma  y como no podía ser de otro manera, el vacuo tsunami de esquizofrenia inconclusa llegó también a la pornografía, y ayer, finalmente, hizo erupción la pospornografía en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA. Como era de esperar, muchas personas se han horrorizado con tal puesta en escena. En estas primeras horas se puede apreciar que el horror nace de una moral violada mediante la explicitación pública de una de las reservas más escondidas y contradictorias de la sociedad; el sexo.

Sin embargo hay que mencionar que es, precisamente, la aparición de indignados morales lo que confirma la prueba disruptiva con la cual certifican su tarea estas corrientes de pensamiento "vanguardista". Es precisamente porque la puesta en escena está montada para señalar y criticar ese lugar moral como un lugar común.

Entiendo que la importancia que podríamos dar a esa simple apuesta no reviste demasiada profundidad analítica o complejidad conceptual, puesto que su aparición mediante esas formas y en esa casa de estudios era completamente lógica y esperable dados los actuales paradigmas dominantes. Y la cosa pasa por aquí: los que se dedicaron toda una vida a la masturbación intelectual, no podían dejar de lado el análisis crítico de la principal industria que impulsa la masturbación real. No hay mucho más que eso.






  

jueves, 11 de junio de 2015

Espejismos

Lo que han dicho Cristina Fernández de Kirchner y Anibal Fernández al respecto de la pobreza, el mínimo de subsistencia y la comparación con Dinamarca y Alemania -en la cual se pone en un grado de superioridad a la Argentina-, es alarmante. Y no es alarmante porque lo han dicho ellos (que en parte de sus tareas deben ficcionar la realidad para guiar el pensamiento de sus receptores), sino por el nivel de la falacia sostenida que emana a consciencia de ser recibida con beneplácito por esos receptores.

Esos dos personajes se dieron a decir esa zoncera de la pobreza porque saben que la ridiculez no sería completa, y ahí está el problema; en quienes están aptos a creer que nuestra pobreza es inferior a la de Alemania, o que estamos mejor posicionados que Dinamarca. Repitámoslo una vez más: tanto la Presidente Argentina como su Jefe de Gabinete de Ministros sostuvieron ese argumento porque saben que hay una cantidad no menor de personas que se darán a la tarea de intentar defender esa posición. Hay una matriz de pensamiento en gran parte de la militancia y la ciudadanía apta para recibir esa comparativa con cierta anuencia -o al menos para no rechazarla con la vehemencia que corresponde-. A saber; el guadañazo igualitarista.

La característica de estas personas podría sintetizarse con un sencillo ejemplo. Supongamos una comparativa entre dos islas con sistemas contrapuestos -como Hong Kong y Cuba-. Estas personas van a sostener que -la a ciencia cierta miserable- Cuba, se encuentra en mejores condiciones que Hong Kong porque; "TODOS tienen sus dientes, acceso a la educación y salud básica y cubren las calorías mínimas. TODOS!!".

En cambio alcanzará con señalar UN SOLO HOMELESS en Hong Kong como prueba suficiente para que sostengan; "en esa isla asiática HAY OPULENCIA que no es lo mismo que riqueza. Y como domina la opulencia, domina aún más la TIRANÍA DE LA INJUSTICIA" (aunque esconderán los homeless de la isla caribeña diciendo que se corresponden a lo que había pasado hace más de 60 años cuando eran el "cabaret americano").

¿Se trata de personas esquizofrénicas, gente equivocada, un grupo de inescrupulosos o sencillamente un montón de nada que hemos legitimado vaya a saber mediante qué proceso?



lunes, 8 de junio de 2015

Argentina eliminó la pobreza

Si congelamos los parámetros con los que se mide una canasta básica a lo largo del tiempo, cuanto más se produzca menos pobreza medirá esa canasta, y es lógico. Un ejemplo; supongamos que congelamos la canasta básica con la que podría definirse una línea de pobreza a principios del siglo XIX, en plena Revolución Industrial. Dicha canasta contendría para una "familia tipo" -4 personas-, algo así como 40 kg de papas al mes, 15 kilogramos de trigo, algunos harapos y vasijas, 20 metros de cuerdas y algunas maderas.

Si dejamos congelado ese parámetro, deberíamos preguntarnos hoy cual es el precio de esa canasta. Y 600 pesos representarían ese consumo. O sea, toda familia cuyos ingresos sobrepasen 600 pesos no debe ser definida como pobre, precisamente porque el indicador así lo establece.

Congelar los bienes de una canasta básica a lo largo del tiempo para medir la pobreza en una sociedad que incrementa su producción, es lo mismo que congelar el parámetro de escala nominal con el cual se ingresa a pagar ganancias en un contexto de inflación. Ambas son formas de estafa; la primera es una estafa intelectual, la segunda es una estafa monetaria.

Cristina Kirchner en la entrega de premios de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura -FAO- sostuvo que argentina posee menos del 5% de pobreza y 1,27% de indigencia.

Es muy probable que su canasta de medición se remita al antiguo Egipto.

martes, 5 de mayo de 2015

Argentina, Kicillof, el salario y la ganancia.

La natural interpretación de la palabra impuesto nos indica que es una obligación que los ciudadanos tienen para con el Estado -y sus administraciones públicas- para hacer frente a gastos operativos. Normalmente la existencia misma del sistema impositivo no se pone en discusión, porque se da por sentado que forma parte de los ingresos administrativos con los cuales se mejoraran aquellas cosas que son necesarias para el funcionamiento de la sociedad y su producción. De esta manera, a más y mejor funcionamiento y producción, las personas estarán más y mejor predispuestas a aportar este tipo de recaudación. En definitiva: la interpretación común en estado puro deja ver que la percepción de un impuesto es una obligación consensuada, no es un pago forzoso. Durante los últimos años esta percepción ha cambiado en Argentina, y lo ha hecho debido a un impuesto altamente distorsivo y progresivamente voraz para con los asalariados argentinos; el impuesto al salario.

El impuesto al salario indica que un grupo de personas quita a los trabajadores un porcentaje de su pago para devolver en forma de mejores condiciones de trabajo. Conceptualmente es lo mismo que el porcentaje de ganancia que se quita al empresario para brindarle mejores condiciones de infraestructura para que emprenda. ¿Hoy sucede así en Argentina? ¿Las mejoras de las condiciones de los asalariados crecen en la misma proporción con la que crece el impuesto al salario?

El porcentaje de crecimiento que mueve el impuesto al salario avanza en forma acelerada, dado que al elevarse los números por el proceso inflacionario luego de las negociaciones paritarias, los salarios comienzan a entrar en en una escala de un porcentaje de entrega bajo concepto de tal impuesto, que está fija. Al estar fija esa escala, y con inflación -baja o alta, da lo mismo-, SE HA CREADO UNA TRAMPA INFRANQUEABLE PARA EL TRABAJADOR: la escala de ganancias fija, con inflación, es como una gran red que cubre un río a lo ancho y los trabajadores son peces que quedan atrapados siguiendo la inevitable correntada de la suba de precios. Así, año a año más y más trabajadores aportan lo suyo a un fondo que se agiganta sin contraprestación; pasa el tiempo y la red atrapa más y más peces. En febrero de 2015 la AFIP recaudó $ 25.165 millones por el Impuesto a las Ganancias, con un crecimiento del 39,7% frente a 2014. Representó el 23,7% del total recaudado. Este número indica que es más de 10 puntos por sobre la inflación oficial y más de 5 por la medida en consultoras privadas; la red atrapa más peces. En los últimos años pasó de recaudarse $ 9.930 millones en 2006 por Ganancias a personas físicas, a $ 111.220 en 2014, lo que representa el 2,59% del PBI.

La defensa que hace el gobierno indica que solo un 11% de los trabajadores entran en este grupo y que Argentina, comparada con otros países, es la que menos incidencia en impuestos al trabajo tiene basándose en algunos datos de la OCDE.

Según esos datos Argentina es el país de más baja incidencia impositiva sobre el salario bruto con 1,5% promedio del total de la masa salarial. Y Dinamarca sería el país de mayor incidencia con 35%. La interpretación de esos argumentos sugiere que aún quedan mucho terreno por captar en concepto de este impuesto y que no ha sido captado aún. ¿Acaso pretenden que Argentina tenga en ese concepto una incidencia de 35 puntos como en Dinamarca dadas las actuales condiciones?

Si esto es así, el cien por cien de los trabajadores deberán tributar el 50% de su salario, sin embargo; ¿Creemos que esta administración dará contraprestación de esos ingresos en forma de beneficios como lo hacen en Dinamarca? Es dudoso (por no decir imposible).

El ministro de Economía argentino Dr. Axel Kicillof ha dicho recientemente que: “No existe obligación de ingresar el impuesto a las ganancias en la medida que el trabajador tenga una remuneración bruta mensual que no supere los $ 15.000, para lo cual se toman los sueldos de enero a agosto de 2013”. Cualquier trabajador que hoy está en un ingreso inferior a este parámetro y está leyendo estas líneas sabe que en la próxima paritaria es muy probable que llegue a ese número. Y comenzará a tributar este impuesto: la red se acerca puesto que la corriente de la subida de precios lo lleva inexorablemente a ella.

Pero el ministro en su argumentación hace otra cosa que es aún más grave; SUPONE QUE UN TRABAJADOR AL INGRESAR EN LA ESCALA ESTÁ ENTRANDO A UN MUNDO DE OPULENCIA Y SALIENDO DE UN ESTADO DE SUBSISTENCIA BÁSICA.

El Ministro de Economía señala al trabajador y lo acusa de ser un voraz personaje con el vientre lleno que se queja por “pagar ganancias”; el Ministro tapa sus falencias con lo que quita a los asalariados de los cuales depende la vida de su gestión. Se equivoca el Ministro desconociendo en su argumento la inflación que atrae a los trabajadores al pago, se equivoca señalando a los trabajadores como ricos descomprometidos cuando tan solo ganan poco más de 15 mil pesos. Y se equivoca desastrosamente sugiriendo que el trabajador no debería quejarse por este impuesto porque; “hay muchos que no llegan a pagarlo”.

Sostener eso tiene la misma lógica conceptual con la que se sostiene que un trabajador debe conformarse con una remuneración a la baja porque hay otros desocupados que lo harían por menos: la extorsión discursiva del ministro de economía es la extorsión montada en la desocupación y la necesidad.

Es como mínimo reaccionario descalificar los reclamos por la actualización de este impuesto que hacen los trabajadores sosteniendo que es un apoyo de los que menos ganan a los que más, porque el Ministro presupone desarticulado el espíritu de cuerpo del mundo de los trabajadores cuando éstos ven que hay un avance concreto sobre sus intereses -por más que haya muchos que hoy no lo sientan-, y saben que si no luchan con los otros, tarde o temprano el trago amargo llegará a ellos: ¿Acaso el Ministro sugiere que Cipriano Reyes debería haber marchado solo con los empleados de los frigoríficos el 17 de octubre de 1945?

Para desmitificar el argumento de altos salarios, también se hace necesario exponer claramente el poder de compra de ese parámetro de opulencia establecido en 15 mil pesos. Esa cifra hoy es un salario de subsistencia par una familia tipo de 4 personas. Hagamos un cálculo sencillo.
 
a. Supongamos una familia de 4 personas con un vehículo promedio de 10 años de uso (año 2005). Solo el combustible en uso de esparcimiento durante los fines de semana el gasto es aproximado a 1000 pesos. Quedan 14.

b. Ahora supongamos un gasto adicional en cada fin de semana como 4 entradas al cine -400 pesos- y cuatro combos de cualquier marca que ofrece un servicio rápido y entretenido para una familia con dos niños en 300 pesos. Nos quedan 13 mil trescientos.

c. Incorporemos que esa familia tipo tiene que pagar un servicio de televisión, internet y dos líneas de telefonía celular (sin mencionar una línea para alguno de los hijos para mejorar la comunicación ante la inseguridad). ¿Le parece bien mil pesos bajo todo este concepto? Ahora estamos en 12 mil trescientos pesos.

d. Pagamos por energía eléctrica, gas y otro tipo de impuestos municipales. Supongamos 500 pesos mensuales que alternan en estos impuestos bimestrales. Ahora quedan poco menos de 12 mil pesos.

e. Incorporemos mil pesos más por mes en cuotas diversas (una computadora para los niños o para la casa en general y algún otro electrodoméstico que siempre debe estar actualizado). La nueva cifra es poco menos de once mil pesos.

f. Comprar el diario todos los días son otros 300 pesos, un atado de cigarrillos diarios 300 pesos más. Estamos en 10 mil pesos.

g. ¡Lo olvidábamos! Hace falta pagar seguro y patente del automóvil del año 2005. Supongamos entre ambos gastos, otros mil pesos. La cifra ahora es de 9 mil pesos.

Nueve mil pesos hoy es una cifra per cápita en una familia tipo de menos de dos mil quinientos pesos para cada integrante. Y no hemos contado aún la alimentación o el pago por alquiler; de esos dos mil quinientos pesos los integrantes deberán comer y vestirse todo el mes descontando los gastos allí arriba mencionados. ¿Considera el lector que podrán hacerlo? Es posible, pero deberán restringirse en algunas cosas como las siguientes:

• NO DEBERÁN GASTAR EN AUTOMÓVIL. O sea; No deberán tener auto.

• NO DEBERÁN GASTAR EN SALIDAS AL CINE LOS FINES DE SEMANA. O sea; no deberán divertirse.

• NO DEBERÁN GASTAR EN UNA COMPUTADORA O EN ACTUALIZAR UN ELECTRODOMÉSTICO. O sea, no deberán actualizarse.

• NO DEBERÁN GASTAR EN TELECOMUNICACIONES. O sea, no deberán comunicarse.

Cuando este tipo de consumo ya no es posible para una familia, comienza a advertirse la proximidad de pobreza. Y es también cuando se advierte la verdadera función de un gobierno con estrategias dirigistas, de corto plazo e intervencionista de mercado y derechos; el gobierno hace todo por silenciar el reclamo mediante planes para que los autos puedan ser consumidos (subsidios a automotrices), planes de “computadores para todos”, promociones de fin de semana o televisión digital “gratis”, en la cual se coarta la posibilidad de ver todo el espectro disponible en oferta multimedia. Y luego de estos paliativos montados en una ficción económica es el mismo gobierno quien pretende que los trabajadores agradezcan por esas dádivas inconcebibles.

Finalmente incorpore el lector a todo lo mencionado, el supuesto de un gasto en alquiler. TENEMOS ASÍ UNA FAMILIA QUE CON 15 MIL PESOS TAN SOLO CUBRE EL ESTÁNDAR DE POBREZA.

¿Acaso podemos considerar como opulenta una familia trabajadora que posee un auto de 10 años en el mercado, que solo pretende poder ir al cine los fines de semana comiendo un combo y que al menos tiene una computadora en su casa y electrodomésticos acordes al tiempo que corre?

Eso no es opulencia, eso es subsistencia en el siglo XXI.

Hoy el impuesto a las ganancias en Argentina, conforme pasa el tiempo y la escala no se modifica, es una red que atrapa a cada vez más personas, y hoy, en Argentina, se señala como una actitud desconsiderada aquella postura con la cual se pretende denunciar esto. Y desde el gobierno se devuelve un reto político a la familia subsistente señalándola como opulenta, y así una vez más un gobierno justifica la mano en el bolsillo con la que mes a mes roba parte de los ingresos familiares. Estamos robando a pobres por la vía institucionalizada.

Este es el punto que no hay que perder de vista para volver a poner el eje de esta discusión donde efectivamente debe estar. No hay redistribución, hay saqueo.





lunes, 6 de abril de 2015

La pobreza, su definición y su estigma.

En los últimos días ha vuelto a estar en agenda la pobreza como tema. Desde las dependencias públicas los funcionarios parecen encolumnarse detrás del argumento que indica que la pobreza es de muy difícil definición. Hace unas horas el Director del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), Lic. Norberto Itzcovich, ha declarado: "No resulta fácil definir qué es pobreza". Días pasados el Ministro de Economía, Dr. Axel Kicillof declaró, con su acostumbrada petulancia intelectual y un dejo acusatorio; "la pobreza es una definición estigmatizante". De esta manera, el Ministro deja el campo minado para señalar a quienes se propongan profundizar, medir, o tan solo observar la condición de pobreza de las personas.

La particular sentencia de Kicillof se presenta apta para acusar de discriminación al bienintencionado ejercicio por indagar aquellos factores que pueden determinar la condición de pobreza. A sabiendas de esto, considero que hoy, Argentina, es un país que claramente se ha empobrecido -independientemente a la cantidad de artefactos que puedan rodearnos y los trabajos a los que circunstancialmente podemos acceder-.

Parto para sostener esta postura luego de haber definido la pobreza, un ejercicio tan difícil para el Director del INDEC y tan estigmatizante para el Ministro de Economía. Y defino la pobreza de la siguiente manera:

La pobreza es el grado de imposibilidad de creación y acceso a bienes con los que las personas sobrepasan la subsistencia primaria, y que se utilizan tanto para la salud y el disfrute como para el desarrollo de sus vidas en producción, intercambio y libertad.

Ponga el lector el número que quiera.

viernes, 3 de abril de 2015

Riqueza y pobreza. Argentina y Japón.

Japón es rico porque es pobre. Argentina es pobre porque es rica.

¿Crees que los japoneses podrían darse EL LUJO de obstruir los ingresos y egresos de Tokio el 80% de los días del año?

Esos SON LUJOS que solo los países ricos se podrían dar. No ellos. ¿Crees que los docentes japoneses se podrían dar EL LUJO de estar tres meses por año sin educar a las nuevas generaciones?

Esos SON LUJOS que solo los países ricos se podrían dar. No ellos.

¿Crees que los dirigentes japoneses se podrían dar EL LUJO de solucionar sus diferencias políticas sin profundidad analítica y guiados por caprichos de universitario poniéndose palos en la rueda en lugar de acordar para que no haya frenos que los empobrezcan?

Esos SON LUJOS que solo los países ricos se podrían dar. No ellos.

¿Crees que los Japoneses podrían darse EL LUJO de no estar pensando constantemente en diagramar para mejorar y actualizar su infraestructura de transporte y telecomunicaciones en lugar de utilizarlas despreocupados por décadas y décadas?

Esos SON LUJOS que solo los países ricos se podrían dar. No ellos.

La pobreza y la riqueza es una condición, no un estigma. Tampoco es una condición digitada, premeditada en forma consciente por algo o alguien. SE PUEDE SER POBRE SIENDO RICO Y SE PUEDE SER RICO SIENDO POBRE.

Pero también se puede ser pobre POR SER rico. Y se puede ser rico POR SER pobre.

Y se puede ser pobre PORQUE SE ES rico, y se puede ser rico PORQUE SE ES pobre.

Hay sutiles diferencias. La riqueza no está definida en la posesión de valijas de dinero, abultadas cuentas en bancos, lujosos yates y estruendosos autos en un garaje. Y la pobreza no está definida por una especie de decreto de imposibilidad de acceso a esas opulentas posesiones. Un japonés que vive en 20 metros cuadrados en el centro de Tokio es más rico que un argentino que posee una hectárea en el conurbano bonaerense con salida mediante un arroyo hacia el Río de La Plata (el más ancho del mundo).

¿Es realmente más rico ese japonés ENVASADO EN TOKIO respecto al argentino HOLGADO EN BUENOS AIRES?

Espero haber ayudado a que lo pensemos. Solo volviendo a pensar este tipo de cuestiones podremos comenzar a dar los primeros pasos para cambiar nuestra situación.


miércoles, 18 de marzo de 2015

De Tasers y Represiones.

Hace unos días ha vuelto a recrudecer el tema sobre las pistolas eléctricas -Tasers- que podría utilizar la policía metropolitana en caso de confirmarse la transacción comercial de compra de este elemento. El uso de este artefacto de prevención del delito y reducción con menor riesgo de muerte (dado que sería la instancia previa a la utilización de un arma convencional), se ha visto retrasado en su disponibilidad debido a una medida de la justicia que había impedido realizar la transacción comercial entre el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los representantes de la marca en Argentina. Hace unos días la justicia definió el caso y, finalmente, se ha autorizado a realizar la compra. Resta aún saber si se autorizará su utilización efectiva.una vez que estos artefactos formen parte de los pertrechos disponibles, sin embargo, ya hay polémica entre los especialistas e intelectuales llamativamente adictos a la desprotección ciudadana y férreos protectores del derecho de los delincuentes, contra quienes sostienen que este tipo de artefacto puede beneficiar y hacer más eficientes los protocolos de prevención del delito, entre otras cosas.

Por mi parte, ya he imaginado como podría ser el enfoque que los clásicos escribas de Pagina12 emanarán este fin de semana al respecto de este tema. Personajes como Horacio González, Ricardo Forster, Horacio Verbistky o Mempo Giardinelli seguramente trazarán un intento parabólico de parangonar la electricidad de esta pequeña arma de prevención, con las picanas de los torturadores de los años 70. Entiendo que podremos leer un intrincado y casi críptico artículo que, en alguno de sus párrafos, sugerirá lo siguiente:

"...Y las descargas eléctricas con las que congelaron las aspiraciones populares de nuestros mejores jóvenes en la década fatídica, hoy han vuelto a ser puestas en las manos de una derecha que se resiste al cambio. Las picanas de Videla ayer, casi como una cabriola del destino perfectamente pergeñada en las oscuras catacumbas del neoliberalismo, se ponen en las manos del macrismo hoy. Y contorneando el gargantuesco acto, la clase media aplaudirá el nuevo Malleus Maleficarum que dictará una justicia antipopular autorizando electrificar a los chicos como lo hacían con el fuego y las brujas en el medioevo. La clase media reeditará la vieja antinomia y el reaccionario ataque que surge del miedo. Una clase asustada que ayer golpeó los cuarteles es la que hoy pide las tasers, artefacto que porta un nombre cruzado por la irónica metáfora de la historia. Taser rememora el nombre de un robot bueno que hace justicia exterminando la maldad, quitando la otredad oscura de cabello duro y dientes manchados, purificando un pedigree de cabellos de oro que cubren caras de una falsa alegría disimulada con el brillo de una deslumbrante sonrisa de blanquecinos dientes. Taser es la perfecta emanación del típico guión de un tanque liberal cinematográfico empaquetado en lo más sofisticado del complejo hollywoodiano. Y así, una vez más, es la impúdica clase media que forja sus prejuicios estupidizada con guiones delicuenciales, la que jalará el gatillo de las descargas sobre las nuevas víctimas: inocentes "otros" de un sistema que no integra ni incluye; sino que oprime. Y mata..."

Y el lunes toda la progresía local compartirá el revelador escrito del oráculo de ocasión.

Usted se entró primero aquí.


sábado, 14 de marzo de 2015

Noam Chomsky en Argentina.


Noam Chomsky pasó por argentina y dejó una frase alarmante: ve a la humanidad "al borde del precipicio". Es lógico.

La humanidad está a muy poco de completar el proceso de interconexión global que comenzó -probablemente-, hace miles de años. En poco tiempo más no habrá un ser humano en el planeta que no esté, potencialmente, conectado con el resto de la humanidad en tiempo real (luego dependerá de cada uno qué posibilidades desarrollará con ese potencial ahí disponible y sobre la base de la capacidad de su descubrimiento en forma espontánea).

Como el señor Chomsky forma parte de esos espíritus serviles a formas de gobierno arcaicas y rígidas formas de pensar la organización humana -como el verticalista y digitado sistema socialista que parte desde las cabezas de supuestos intelectuales aptos para organizar a la humanidad en su búsqueda de igualdad y justicia, bajando hasta lo más llano para digitar las voluntades y posibilidades del último ser humano atado al organigrama-, ve, intuye que esa interconexión hará dificultosa la propaganda de Estado y la digitación completa de los parámetros que acostumbra a manejar. Intuye que ese avance inevitable de la humanidad -que hoy suele definirse con la mirada de la cibernética-, potenciará un beneficioso -y virtuoso- camino a la libertad individual. Mal que le pese.

Es por esto que el señor Chomsky cree que la humanidad está por dar "un salto al vacío". Y justifica su conclusión -como también es lógico en intelectuales de su corte-, elevando el grito de acusación señalando las injusticias de la guerra (proceso horrendo que ha existido desde que la humanidad es humanidad), por los riesgos del daño medioambiental -proceso similar al anterior hoy con muy buen posicionamiento de márketing político en las líneas de su ideología gracias a los nuevos formatos de interconexión -. Y, finalmente, para sellar su justificación de postura -ya seguro de haber hipnotizado a su público con esas altisonantes denuncias-, pone la frutilla del postre lingüístico que trae desde Estados Unidos acusando a los poderosos que están escondidos sin que los percibamos, haciéndonos daño, empobreciéndonos, atontándonos con fetiches lobotómicos con los cuales quedamos tarareando estupideces mientras nos chupan la sangre una y otra vez.

Y una vez más...

Una vez más el señor Chomsky viene a pegarnos el cachetazo adecuado para que despertemos de esa larga ensoñación a la que "los neoliberales" nos han empujado. Viene a quitarnos de encima esa máquina abstracta con la cual los malos nos brindan tranquilidad para succionar nuestras virtudes y dejarnos a merced de nuestras propias idioteces: Chomsky ha venido a correr el telón, a descubrirnos LA VERDAD.

Sí, pasó Noam Chomsky por Argentina y no podía haber disertado en otro lugar que no sea un recinto llamado Paco Urondo, en la Universidad de Buenos Aires. Y me ha dejado una pregunta.

¿Realmente vino a quitarnos las vendas y a despertarnos de un gran letargo? ¿O ha venido para apuntalar nuestro atontamiento?

jueves, 5 de marzo de 2015

Distancias.

¿Recuerdan cuando el ex-jefe de gobierno Anibal Ibarra había contratado un grupo de personas para que lo abracen, y quedó al descubierto ante las cámara de Telenoche por intermedio del periodista Daniel Malnatti? Por si no lo recuerdan, dejo aquí el vídeo.




El vídeo que he incorporado vino a mis recuerdos luego de ver la fotografía que al final de la nota dejo incorporada, en la misma se puede observar al Ministro de Economía, Axel Kicillof, requerido por la militancia en la última marcha organizada por el gobierno al que pertenece como cuadro técnico. Esa imagen de alguna manera me hizo retrotraer al bochornoso momento del ex-jefe de Gobierno Porteño Anibal Ibarra. Y me empujó a trazar las líneas que a continuación incorporo.

Nos golpea la imagen que deja un político caminando por la calle cuando descubrimos que ha contratado personas para ser abrazado, montando una escena de simulación con la cual se presenta querido, amado. Repugna el acto al percibir la verdad inmediata, y quien pretendía mostrarse querido, de repente se torna vil, mentiroso y hasta lo digerimos con cierta violencia. Nos indignamos. Cuando vimos a Anibal Ibarra llamar por teléfono a sus colaboradores para que dejen de enviar abrazadores pagos, parecía que estábamos adelante de un idiota completo a la vez que de un completo miserable.

Ahora bien; ¿No pasa exactamente lo mismo -aunque con una distancia que nos cambia la perspectiva- cuando vemos al Ministro de Economía requerido para el abrazo y la selfie por parte de personas que llegaron al lugar con medios de transporte promocionados y cuyos ingresos en gran parte dependen de la acción del Ministro que ha logrado quitar recursos de un lado para redistribuir hacia ellos por diferentes vías, diagramadas a consciencia y que forman un paga indirecta similar a la que nos indigna en el caso Ibarra cuando la vemos de cerca y a menor escala? ¿El subsidio, asignación o lo que fuere que reciben esas personas no es, de alguna manera, un pago indirecto que termina siendo contraprestado con una demostración de afecto un tanto más "natural" que la demostrada en el caso Ibarra?

Creo que es lo mismo. La diferencia pasa por la distancia conceptual con la cual podemos percibir ambos procesos. Uno más directo -Ibarra-, el otro más lejano -Kicillof-. Y no solo las distancias hacen su juego, sino también el cruce de necesidades que empujan a tales relaciones. Y en este sentido, hasta podría argumentar que la esencia que permea la relación Kicillof-militantes, es más tóxica que la de Ibarra-festejantes.

sábado, 21 de febrero de 2015

El Chavismo de Maduro.

Es patético y genera escozor ver a Nicolás Maduro haciendo los mismos gestos que el fallecido Chávez, ello muestra claramente que ha estudiado la misma forma de guión para trazar una misma puntualización, utilizando hasta las mismas exclamaciones. Maduro hoy es la copia fiel, aunque con bigotes -como en un cuento de Borges en el cual el cuchillero Rosendo "El Pegador", era tan admirado que le copiaban hasta la forma de escupir-. Y esa triste imagen también deja un mensaje.

Deja expuesta la idiotez a la que sume la ideología a una persona, dejándola incapacitada para captar que está presenciando la actuación de un tirano acercándose al peor estado psicológico deseable para un enfermo de esa calaña; el saberse próximo a quedar sin nada. Y eso es muy peligroso.

Este tipo de personas generalmente tienen una conducta que se repite a lo largo de la historia. Ante la desesperación que los aborda en paralelo a la toma de consciencia del vacío que se aproxima, reaccionan como lo que en última instancia son; estúpidos asustados ante el inexorable devenir del ocaso. Y en esa reacción generan el último gran acto que puede generar un idiota con poder; ordenan la represión total sea cual fuere el costo.

Espero equivocarme. Sinceramente.

viernes, 13 de febrero de 2015

Golpismo Activo y Oscuridad.

Desde el gobierno intentan revertir cualquier intento de acusación y su lugar a la investigación correspondiente indicando, peligrosamente, que se trata de un GOLPISMO JUDICIAL ACTIVO. Puede leer al respecto aquí. Por mi parte intentaré explicar en forma breve el peligro subyacente a esta postura gubernamental.

El riesgo que esconde el concepto de "golpismo judicial activo", pasa por el encapsulamiento de toda posibilidad de búsqueda -y encuentro- de justicia por fuera de la conveniencia gubernamental. Con ese concepto se incorporan condiciones oscurantistas. Se coarta cualquier posibilidad de búsqueda de una verdad.

Supongamos que estamos ante un hecho que objetivamente pueda ser demostrado, y que muestre a un funcionario público del oficialismo incumpliendo el deber de su rol, dejándolo en posibilidad de ser imputado, juzgado y apresado.

¿Como podríamos encausar tal imputación, juzgamiento y su correspondiente envío a prisión si se ha incorporado en el protocolo jurisprudencial ese concepto de "golpismo activo"? No se podrá, dado que cualquier intento por hacerlo será patentado políticamente como "una conspiración" (puesto que sería un intento de golpe).

Por lo tanto -y sin juicio previo-, no podrán apresar mientras que un grupo de cientos de seguidores aplauden en el patio de Casa de Gobierno.

De esta manera el concepto de "golpismo activo" adquiere una doble función; anula la búsqueda de justicia a la vez que se transforma en una coartada para delinquir en paz.

Es la imagen de una dictadura.

domingo, 18 de enero de 2015

Thomas Piketty, el marxismo y el relato.


Por estas horas el economista francés Thomas Piketty está en Argentina. Gran parte del mundo de esta ciencia esta hablando de él y su trabajo. Como siempre, hay quienes hablan sin haberlo leído y otros que toman posiciones de altura argumentando que lo han leído completamente no solo una, sino varias veces. Por mi parte soy de los que está a medio camino, aún leyendo su libro (está en inglés y ya de por sí soy lento para leer en castellano, doblemente lento para hacerlo en inglés). Pero de todas maneras voy a dejar mis comentarios sobre lo que hasta ahora he observado y que me ha llamado la atención.

El economista francés, según se dice, se apoya en Marx para desarrollar todo su andamiaje y su supuesto "gran nuevo conocimiento", del que se desprenderían grandes nuevas formas de operar para la ciencia económica -de ahí su nombre "El Capital en el Siglo XXI"-. Sin embargo desde el inicio se observa una flagrante equivocación sobre el concepto de capital desde el mismo Marx.

Me voy a explicar intentando compactar de la mejor manera posible este yerro que observé (siempre dando por sentado que Piketty está parado sobre cimientos marxianos), y a riesgo de poder incurrir en algún olvido o exceso de simplificación que pueda llevar a algún yerro propio. En adelante el lector encontrará, probablemente, una excesiva cantidad de paréntesis, pido disculpas. Pero en estos formatos no es del todo cómodo y claro el utilizar "nota al pié de página".

Lo que Piketty define y entiende como capital está total y completamente mal desde una visión marxista -a la que supuestamente el adhiere-. Y es también inaceptable la pretensión de "aggiornamento de El Capital para el siglo XXI": El capital, conceptualmente, no es un stock, y menos aún algo que se hereda. Y el libro "El Capital" tampoco habla de un sotck al que pueda percibirse esencialmente con los sentidos inmediatos -vista, olfato, gusto, tacto, oído-, dado que mediante ellos solo logramos quedar engañados por el nivel de las apariencias. Piketty parece creer que el capital es una bolsa de dinero, una cantidad de bienes acumulados, máquinas, cantidad de tierra a disposición o papeles firmados que certifican la voluntad de un poseedor que se retira y autoriza pertenencia de posesión para un tercero. 

El capital es un proceso de reproducción constante que perméa en nuestras mentes y se refleja en forma espasmódica en cada certificación comercial de propiedad y transacción (sí, ya se, inentendible y muy parecido a una superchería, pero eso es Marx mis estimados lectores, de la idea a la materia y de ésta a la idea nuevamente, para volver a dilucidarla). 


O sea, el capital es un proceso que ficciona cobrar su forma concreta mediante diferentes elementos como pueden ser desde una escritura hasta una boleta de compra venta de cigarrillos. Desde una compra de acciones o una empresa para segmentarla y venderla, hasta el cierre certificado de una transacción de oferta y demanda en el mercado de trabajo. Siempre, claro está -reitero-, desde Marx.

Nuevamente, el capital "encarna" gracias y mediante la estructura institucional formal al momento de la transacción; ni antes, ni después. Y para ello (para que la encarnación exista dado que es en capitalismo el proceso indispensable para el crecimiento y la acumulación en el sistema que es la importancia central del trabajo de Piketty) debe haber una especie de "crono-estructura de conteo". Quienes ejecutan esta cronoestructura toman diferentes formas y roles, los más acostumbrados son los contadores -y una gran parte de los economistas, en especial aquellos que se quedan en el nivel de las apariencias contando números-*.  


Antes o después de ese momento de “encarnación”, el capital se escinde, es algo muerto que solo vive en las mentes ya acostumbradas de las personas que funcionan como autómatas guiadas por una búsqueda que no saben bien qué es (desde ahí el tan mentado tema de la toma de consciencia de clase y la forma de pensar con la cabeza del amo bajo el sistema "ficcional burgués"): EL CAPITAL NO ES UN STOCK, ES UN CONCEPTO.

Y es cierto que stock también es un concepto, pero no hay neutralidad para hacer un pasaje de términos. No es lo mismos stock que capital en Marx.

Todo lo anteriormente mencionado el señor Piketty ni lo tiene en cuenta. De hecho, entiendo que ni lo sabe, y entiendo que no tiene ni la más mínima idea de ello. En especial porque no está haciendo otra cosa más que contar números. Aunque disfraza la vulgaridad analítica (siempre en términos de Marx) con la cuestión de la denuncia implícita. Pero a ciencia cierta, si Karl Marx se despertara de su tumba diría que el señor Piketti no es más que otra forma más de la vulgaridad de análisis a la que ha empujado el sistema mundial con toda su ficción fetichista.

Finalmente debo indicar algo que no es es menor, no me defino marxista, sino todo lo contrario. Sin embargo, me he dado a estudiar esa corriente para poder mejorar mi crítica hacia esos trabajos y el de sus adláteres en el momento que sea necesario, en especial en mis aulas. Y todo para mejorar la calidad de este tipo de entrega a mis alumnos, para que no se dejen engañar con supercherías, sea la original (Marx) o las malas copias (los pikettys y cía).

Espero que se haya entendido algo. No es sencillo llevar la esencia de estos temas a "todos y todas".


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Los marxistas suelen mofarse de los contadores argumentando que aún hoy no han captado la esencia de su rol en el sistema y se quedan haciendo piruetas para ayudar a evadir impuestos cumpliendo normas legales preestablecidas en lugar de captar adecuadamente lo que están haciendo -y su crítica va también para los "economistas burgueses" a los que llaman vulgares-. Y esto se daría así porque la superestructura formal con la que todos hemos sido educados, descansa tanto en su construcción -como en su aplicación y transmisión-, también en el nivel de las apariencias. Apariencias que a su vez se construyen sobre la determinación de los aspectos materiales que logra captar nuestra sencillez de sentidos -los inmediatos montados en la razón simple-. Pero todo ello conforma la relación de dominación de quienes más materia poseen sobre quienes menos. Decantando en una relación de dominación de quienes lo poseen todo hacia quienes no poseen nada más que la fuerza de trabajo de su cuerpo, la cual entregan en oferta al mercado. Y será solo pagada por la fuerza quedando la acumulación del producto de su venta en manos de quien posee más atributos para comprar la fuerza -el empresario dueño de los medios de producción-. 





jueves, 15 de enero de 2015

Marxismo, el inicio.


Tiene 18 años, su primer trabajo le exige entregar su vida 8 horas diarias 6 días a la semana. Sabe que con su salario podría comprar ropa de mejor calidad y darse algunos gustos si vuelve a vivir a la casa de sus padres, pero prefiere pagar el costo de su libertad alquilando un departamento de dos habitaciones que comparte con tres amigos; es consciente que de no compartir ese gasto no podría independizarse (una independencia parcial, ciertamente, dado que continúa llevando su ropa a lavar a casa de su madre desde la cual vuelve siempre no solo con su ropa limpia sino también con unas cuantas provisiones extra). Un buen día, all llegar al departamento después de un día de trabajo tenso debido a un agudo contratiempo que tuvo con su jefe, encuentra sobre la mesa una fotocopia que pertenece a uno de sus amigos, el que estudia Sociología y no trabaja dado que sus padres costean sus gastos hasta tanto se reciba. La fotocopia lleva un título sugestivo; "El Manifiesto Comunista". Ha escuchado hablar de eso, y ahora más que nunca quiere saber de qué se trata. Ahora, que se ha peleado con su trabajo...

Destapa una botella de cerveza, abre la fotocopia sobre la superficie de una mesa de pino tratado (comprada en un remate entre los cuatro habitantes del departamento) y sobre una endeble silla comienza a descubrir de qué se trata el escrito. Recibe de inmediato toda la potencia de un golpe de knock-out que solo el poder de la palabra puede generar, un golpe que percibe como un balde de agua fría que le han tirado por la espalda para despertarlo de una larga ensoñación:

"La historia de toda sociedad hasta nuestros días no ha sido sino la historia de las luchas de clases.

Hombres libres y esclavos, patricios y plebeyos, señores y siervos, maestros y oficiales, en una palabra: opresores y oprimidos se enfrentaron siempre, mantuvieron una lucha constante, velada unas veces y otras franca y abierta; lucha que terminó siempre con la transformación revolucionaria de toda la sociedad o el hundimiento de las clases en pugna.

En las anteriores épocas históricas encontramos casi por todas partes una completa diferenciación de la sociedad en diversos estamentos, una múltiple escala gradual de condiciones sociales. En la antigua Roma hallamos patricios, caballeros, plebeyos y esclavos; en la Edad Media, señores feudales, vasallos, maestros, oficiales y siervos, y, además, en casi todas estas clases todavía encontramos gradaciones especiales.

La moderna sociedad burguesa, que ha salido de entre las ruinas de la sociedad feudal, no ha abolido las contradicciones de clase. Únicamente ha sustituido las viejas clases, las viejas condiciones de opresión, las viejas formas de lucha por otras nuevas.

Nuestra época, la época de la burguesía, se distingue, sin embargo, por haber simplificado las contradicciones de clase. Toda la sociedad va dividiéndose, cada vez más, en dos grandes campos enemigos, en dos grandes clases, que se enfrentan directamente: la burguesía y el proletariado.
"


Vuelto en sí luego de ese sorprendente tramo, habiendo bebido el contenido de la primera botella de cerveza en tanto que va raudo a abrir la siguiente para continuar la lectura, advierte que él es un proletario y que su jefe, o bien es un burgués idiotizado al servicio de un amo (el dueño de la empresa para quienes ambos trabajan), o bien un proletario sin consciencia de su clase que es explotado pero no lo advierte dado que piensa con la cabeza del dueño de la empresa.

Esa noche lee todo el manifiesto y bebe toda la cerveza, al día siguiente despertará otra persona. El trabajador adolescente murió esa noche en esa habitación para dar paso al hombre. Un hombre revolucionario que ya no trabajará más, evitará que otros trabajen. No estudiará más, evitará que otros estudien. No amará más, evitará que otros amen. No será feliz, evitará que otros lo sean.

Y lo más importante de todo; continuará utilizando la casa de su madre para lavar su ropa y traer sus provisiones.

Así comienza la historia.

martes, 13 de enero de 2015

¿Tampónes o Intelectuales?

"¿Idea o materia?" Probablemente esa sea la pregunta que sintetiza el pensamiento filosófico fundamental occidental. Desde ella se han construido los cimientos conceptuales que dieron forma luego, a los grandes edificios del conocimiento de los últimos dos mil quinientos años. El kirchnerismo, como no podía ser menos, ha aportado lo suyo en este desarrollo.

Movimiento con un arraigado empecinamiento ideológico, ha contribuido a deconstruir el constructo histórico que ellos siempre han denunciado en tanto género, a saber: La historia de una "humanidad machista"; y así, han hecho una cruzada a favor de la mujer. Su líder no expresa jamás discurso alguno sin mencionar el saludo clásico "todos y todas". La discusión de género ha sido primordial para este particular movimiento, se ha incorporado la figura del femicidio, se han hecho ingentes esfuerzos para impulsar cupos femeninos en las relaciones laborales (aunque no han advertido que esa particular batalla discrimina al género negativamente, pero sería para otro escrito) y tenemos una larga lista de voluntades ideológicas para con la mujer. Sin embargo, han olvidado la otra parte de la historia del pensamiento occidental, la materia.

A esa mujer que se la saluda en femenino, a esa mujer que se la ayuda en la jurisprudencia, a esa mujer que se la ajusta a simetría masculina en el lecho de Procusto laboral kirchnerista, la han dejado sin nada una semana al mes.

En tanto materia, no hay nada más diferenciador entre hombres y mujeres que la menstruación. Sin embargo, el kirchnerismo -tan comprometido con las mujeres y tan díscolo con la feminidad-, las ha dejado sin lo que es, probablemente, la creación material más generosa que ha dado la humanidad para con ellas. No olvidemos que no hace tanto tiempo las mujeres debían encerrarse 5 días al mes so pena de ser señaladas impuras. Hasta la aparición de esa gran solución en forma de algodón supercompacto, las mujeres en estado de menstruación se veían prácticamente imposibilitadas de disfrutar de una tarde en un club, una pileta, un día de campo o cualquier actividad alejada de un entorno de encierro. El tampón, materialmente, ha hecho más por eso que llaman “igualdad de género” que miles de libros escritos por insufribles y ególatras intelectuales comprometidos.

Y el kirchnerismo, tan amigo de la mujer pero tan enemigo de la feminidad. Tan amigo de las ideologías pero tan enemigo de la materia, ha empujado a la parte más libre y femenina de nuestras mujeres al encierro del medioevo. Eso sí, al revolucionario grito de “todos y todas”.




domingo, 11 de enero de 2015

Charlie Hebdo Antes de la Masacre.

Así interactuaban en su ambiente de trabajo algunas de las víctimas de la masacre de Francia. En el vídeo podremos verlos deliberando algunos detalles que hacen a la construcción de sus caricaturas y el mensaje que con ellas pretendían transmitir.


sábado, 10 de enero de 2015

EL PANELISTA COMPROMETIDO.


Sale rápido del estudio de radio, pasa por un Starbucks y toma un café mocha blanco acompañado de un muffin de banana y nuez. Mientras se entrega a ese pequeño placer cotidiano, chequea con su Phablet actualizaciones en las redes y su casilla para coordinar los temas que se abordarán en el programa nocturno, del cual es panelista.

Va al gimnasio, realiza una rutina completa de crossfit junto a su personal trainer para luego tomar masajes y un baño de inmersión. Pasa por el servicio de bar del establecimiento, se nutre con 3/4 litros de Gatorade y parte hacia el estudio de televisión.


Estaciona su Mini S Hot Pepper en el estacionamiento y espera en el set al representante de la marca con la cual se vestirá para el programa nocturno. En 40 minutos está todo listo. Se encienden las luces y se sienta cómodamente en su posición. El tema del día; Cuba y su situación.

Observa las posturas con su cabeza levemente inclinada a un costado, está pensando como comenzar con su aguda intervención, ya llega:


"El caso de Cuba no es un caso más, para abordar a la ligera. Si hay algo sobre lo cual el pueblo Cubano puede darnos una gran lección, es sobre dignidad. Todos hablan de encierro, de pobreza y no sé cuantas tonterías más, pero esa es una visión maniquea del verdadero asunto que se juega en esa mirada parcial, empujada por una visión liberal e individualista de la vida que nos viene impuesta. ¿Acaso alguno de ustedes se ha puesto a pensar que nuestra vida hoy aquí no es más que una moneda de intercambio más de este sistema perverso de consumo capitalista?. Cuba es un ejemplo de emancipación de los pueblos, la gente no está contaminada con los fetiches burgueses de las sociedades de compra/venta actuales, en las que todo está de oferta. ¡Como le gustaría al Imperio que Cuba se contamine verdaderamente!. Esa dignidad es legado y obra de Fidel Castro, un personaje del que todos hablan y del cual ninguno se ha puesto a pensar como corresponde. ¡Hasta se lo ha comparado con Videla y Pinochet!. Por favor señores, seamos serios! Cuba es un ejemplo de igualdad y dignidad, todos están educados y su sistema de salud es ejemplar".


Se siente bien, su corazón late más rápido, fuerte, vivo; ha manejado un estado de ánimo y ha alimentado su ego con la mirada de los otros.

Se apagan las luces del estudio, su Phablet indica que esperan en el restó donde tiene una cita, y Booking envía la confirmación de reserva de su habitación 5 estrellas en Meliá Varadero, destino donde pasará sus próximas vacaciones.

Es el panelista socialmente comprometido.