miércoles, 28 de marzo de 2018

El Estado y el dolor de las madres argentinas.

El pasado lunes 26 de marzo, a 48 horas de un nuevo aniversario del golpe de Estado del 24 de Marzo de 1976, mientras leía un portal de noticias que informaba sobre el viaje de familiares de caídos en el conflicto de Malvinas, los cuales iban por primera veza a depositar una flor en la tumba de sus seres queridos (que ahora habían sido identificados y ordenados como corresponde), se desarrollo en la mesa contigua un tenso intercambio. El acalorado momento tenía relación con lo que estaba leyendo en ese portal. Y una de las personas de esa mesa, visiblemente contrariada, dijo lo siguiente:

"Mirá, querido, a las madres de los caídos en Malvinas, el Estado se los llevó a la fuerza cuando cumplieron 18 años, les metió unos borceguíes en las patas y les puso en las manos un fusil a cada uno. Los cargó en un Hércules y se los llevó a 4 mil kilómetros de distancia y los tiró en el medio del campo a 10 bajo cero y los puso a cavar pozos para esconderse y esperar a los ingleses para cagarse a tiros (si sobrevivían a los bombazos de los aviones y los barcos). Después de haber estado un mes enterrados en el pozo que ellos mismos cavaron y con agua helada y barro hasta la cintura, empezó el combate y los recontracagaron a tiros a todos. A aquellos muchachos que el Estado no tuvo ni tiempo ni supo identificar, los amontonó y los dejó tirados allá. Ese mismo Estado, a las madres de esos muchachos no les dio ni las gracias. Después de 36 años, a las que aún viven, les pagan un vuelo y las tiran en medio del campo para que vayan a llorar al lado de un trozo de mármol que tiene grabado el nombre de su hijo -que vaya uno a saber si es que realmente ahí está-: ¿y vos te ofendés porque yo digo que me tienen podrido un grupo de madres que se ponen un pañuelo blanco en la cabeza cuando todo el mundo sabe que muchas de ellas pusieron fusiles en las manos de sus hijos, los mandaron a poner bombas caseras sin pensar en muertes inocentes y a pelear en las calles sabiendo que si los agarraban los iban a hacer mierda, y que encima el Estado las homenajeó con días feriados, 25O mil dólares a cada una, honores públicos, acceso a los medios de manera privilegiada, reconocimiento en cuanta fundación hay, manejos presupuestarios por cientos de millones de pesos sin contraprestacion, universidades, cátedras, postulaciones a premios, rangos e instituciones internacionales, acceso a lobbys de todo tipo, nombres en plazas, calles, cines y no sé cuantas cosas mas?

¿En serio te ofendés porque yo digo que pensé más, en este 24 de marzo, en las madres de Malvinas que fueron a la tumba de sus hijos olvidados que en las madres de Plaza de Mayo que fueron a gritar con un grupo de imbéciles y delincuentes "Macri, basura, vos sos la dictadura"? ¿Por qué no te vas un poco a la mierda, flaco?
"

Esas palabras que escuché las recuerdo hasta en sus puntos y comas, puesto que al momento que ese señor las estaba diciendo con voz firme, yo estaba observando esta imagen de una madre de Malvinas que en ese preciso instante estaba llorando en la tumba de su hijo, 36 años después.