Dijeron que es falso que la economía argentina venía en recesión y apelaron a un informe de Orlando Ferreres –puntualizando que es un economista opositor-, diciendo que la economía creció en 2015 1,7%.
Para descartar que “se venía en recesión” hay que tomar puntas, por caso un comparativo 2014-2015. En ese punto el crecimiento fue nulo o negativo. Menos 2% 2014 contra 1,7% positivo. El promedio confirma el estancamiento.
Se dijo que es falso que la inflación venía en aumento puesto que la Ciudad de Buenos Aires estimó que la inflación pasó del 33,6% en 2014 al 19,7% en el 2015, y el IPC Congreso marcó que la inflación pasó del 33,5 % en 2014 al 20,4% en 2015. La falacia argumental se da porque en el discurso presidencial se dijo que veníamos de un período de alta inflación, no que “venía en aumento”. Por lo tanto no hubo falsedad en este punto, dado que el propio dato que incorpora y reconoce la crítica que pretende la anterior administración, lo demuestra.
Se dijo que es falso el enfoque monetarista de la inflación –seguramente no han leído 4000 años de controles de precios y salarios de Schuettinger y Butler-, y creen demostrarlo indicando que el gobierno de Macri ha planchado la emisión y la inflación continúa. No comprenden ni lo más básico de la parte subjetiva de un proceso económico, cuanto que tampoco la intertemporalidad del mismo. Creen que las respuestas son inmediatas y no existe inercia y expectativas. Tampoco se enteraron que en los últimos días el gobierno no planchó la base monetaria sino al contrario, la expandió en unos quince mil millones de pesos.
Se dice que la emisión puede ser un mecanismo de propagación de la inflación y nunca una causa principal, y se dice también que no hay evidencia empírica de que lo sea. Estas personas creen que con decir que correlación no es causalidad, demuestran la no evidencia empírica de la relación entre incremento de cantidad de dinero no solicitado e incremento de precios. 4000 años de correlación lo demuestran.
Dicen que es falso que el déficit fiscal heredado haya sido del 7% porque incorporan gastos que se deberán pagar en 2016. Descartar ese tipo de conteo de esa manera es de alguien que no tiene ni la más mínima idea de lo más básico de un contable o alguien que de mala fe quiere engañar intelectualmente a la gente. Lo que se hace pagando hacia adelante, respecto de lo que se tiene como objetivo contable para indicar si se posee déficit o superávit OPERATIVO, ES LA PRESTACIÓN PRESENTE NO EL PAGO FUTURO. Si en 2016 se paga por EL GASTO QUE SE HIZO EN 2015. SE DEBE COMPUTAR COMO DÉFICIT EL GASTO 2015 EN FORMA DE PAGO 2016.
También se argumenta que se agregó al cómputo del déficit las utilidades que el central le giró al tesoro. Eso es no tener idea de la independencia del Banco Central y su contable respecto de la independencia del tesoro y su contable y la transferencia de pasivos y activos. Se habla de “legitimidad” pero es una definición política más que técnica. También se dice que el déficit se agranda porque se computa la pérdida de ingresos por retenciones. Es también una escasa comprensión de lo más básico de la administración eficiente de los recursos escasos que una economía debe administrar. No hay país en el mundo que tenga una estructura de retenciones con la cual se nutre a los niveles que lo ha hecho argentina en los últimos años, el problema, nuevamente, es el agujero que las retenciones financiaban, no la desaparición de ese ingreso. Siempre, claro está, en términos de medir correctamente el déficit.
También se dijo desde algunas usinas K que en tiempos de recesión global, lo normal es que los países del mundo tengan déficit puesto que con ellos se estimula el consumo y se frena el ciclo recesivo. Se sostiene que durante 2015, de 188 países en el planeta, sólo 21 tuvieron superávit “financiero”. No dicen estas personas que de 188 países Argentina es uno de los tres con mayor inflación en el globo desde hace más de 6 años.
En fin, la “intelligentzia kirchnerista” continúa “diciendo” demasiado. Pero la verdad, es que no dicen nada
También se dijo desde algunas usinas K que en tiempos de recesión global, lo normal es que los países del mundo tengan déficit puesto que con ellos se estimula el consumo y se frena el ciclo recesivo. Se sostiene que durante 2015, de 188 países en el planeta, sólo 21 tuvieron superávit “financiero”. No dicen estas personas que de 188 países Argentina es uno de los tres con mayor inflación en el globo desde hace más de 6 años.
En fin, la “intelligentzia kirchnerista” continúa “diciendo” demasiado. Pero la verdad, es que no dicen nada
No hay comentarios:
Publicar un comentario