miércoles, 30 de noviembre de 2011

EL CAPITALISMO

En los siguientes cinco videos concatenados se incorpora el desarrollo de un Curso dictado por Ayn Rand en el Ford Hall Forum de Boston el 19 de noviembre de 1967. Este curso es esencial para entender en su raíz la validación moral y epistemológica del capitalismo









viernes, 25 de noviembre de 2011

"EL MODELO" Y SU EMPUJE SOCIAL

Imagina que posees unas vacas y un par de hectáreas para iniciar un pequeño emprendimiento ganadero, cuando de repente llega un representante del gobierno y las acorrala indicando un posible brote de aftosa. Sin dar ningúna explicación delimita un área de exclusión complicando el proceso de alimentación de tu ganado. Comienzas tu reclamo y te responden con un subsidio para que pagues una empresa tercerizada mediante la cual alimentarlas. Viene el sindicato de peones a recriminarte por no alimentarlas con su personal, pacientemente intentas explicar que no tienes nada que ver en este entuerto, que para alimentar un par de vacas basta y sobra con la fuerza de tus brazos y tus piernas, pero que no puedes hacerlo porque hay una zona de exclusión. Los peones comienzan a pelearse con los tercerizados, vuelan las piedras. Las vacas continúan famélicas. Y tú a los gritos intentando ser escuchado; "pero se mueren las vacas!". Un emisario del gobierno te dice "¡Cállate oligarca!". Muere de un piedrazo un trabajador tercerizado, todos salen corriendo y se esconden como las ratas lo hacen en un albañal. En el lugar no queda nadie, menos aún el contralor del gobierno. Corres desesperado a ver el ganado, pero encuentras solo pedazos de carne y cuero que yace sin vida en la sequedad de un terreno inhóspito, entonces piensas; "debería haber dedicado mi esfuerzo a la soja”.

Llegas abatido a la pequeña e improvisada habitación del terruño, dejas tu cuerpo caer pesadamente en la cama mientras enciendes la pequeña radio atenazada en tus manos. Pensando en aquel esquivo brote pastoril escuchas que comienza una nueva ronda de mensajes en cadena nacional, percibes el tono firme en el tronar de la presidente mediante unas palabras que, al unísono de su emisión, parecen cobrar mágicamente un significado opuesto al que supuestamente responden; sientes estar en presencia de un poder transformador cuando observas que lo que aparece como un embeleso conceptual, llega a tus oídos como una afrenta guerrera; "...aumentaremos las retenciones a los granos porque hay demasiada opulencia, renta extraordinaria y falta de generosidad, conviviendo irresponsablemente con excesivas necesidades básicas insatisfechas y falta de dignidad..."

Continúas con atención el discurso y se oyen voces que presentan a los nuevos líderes de las juventudes dignificantes. Uno de ellos comienza a hablar e instantáneamente su voz resulta familiar: es el jefe de los tercerizados que inició el descalabro en tu campo conviviendo en el palco con el líder del sindicato de peones; la contraparte de la barbarie. Harto de la situación, decides irte sin importar el costo, te empujas a dejar tu tierra con lo poco que de ella queda. Vas derecho al aeropuerto pensando en organizar una nueva vida, imaginas ya nuevas metas e intuyes nuevos medios para tales fines, sientes que el pesar va calmando el hastío y no quieres mirar atrás. Llegas al mostrador para comprar un pasaje y te encuentras con una muchacha que, portando la imagen y la voz de la empresa que en minutos debía montarte hacia una nueva ilusión, te informa: “los vuelos están paralizados hasta nuevo aviso”.

Tercerizados y sindicatos aeroportuarios han parado las operaciones y se escucha el sonido de bombos que llega desde el interior de las aeronaves; lo único que vuela en la pista son piedras. Cansado ya y casi sin ganas de continuar viviendo, decides ir a una armería y gastar lo último que queda de tu dinero para comprar un arma y volarte los sesos. El vendedor, advirtiendo tu estado y conociendo el paño, sugiere que no desperdicies 8 balas si vas a utilizar tan solo una. Un inexplicable proceso te hace tomar conciencia de la utilidad que puede poseer un excedente innecesario y te abocas a la tarea de hacer algo bueno con tu vida: algo bueno en forma explícita; sientes que puedes ser solidario entregando súbitamente y sin pedir nada a cambio, aquel residuo metálico, aquellas 8 balas. Compras el arma con sus nueve movimientos y comienzas a caminar en silencio. Utilizas una con el líder de los tercerizados del campo, luego otra con el sindicalista de peones rurales. Comienza a gustarte la solidaridad, sientes la potencia del poder de ese pedazo de metal en tu puño y fluye nuevamente ése impulso vital que parecía perdido. Utilizas una tercera bala para el representante del gobierno que construyó el corral estatal para tu ganado. Casi como por una jugarreta del destino, quien lo acompaña en el auto es una cara conocida, la recuerdas claramente, es el burócrata que había pretendido denostarte en forma acusatoria al grito de: "¡oligarca!". Con pulso sereno, sin titubeos ni remordimiento, depositas en su vientre dos eficientes regalos de plomo.

Ya eres consciente que no vale la pena matarse, sino corregir injusticias, y sabes que aún puedes sentirte vivo 4 veces más. Vuelves en silencio a tu casa, escuchas al taxista hablar de inflación, te dice que no puede pagar el reemplazo de sus neumáticos y agradece pertenecer a un sindicato fuerte que le acerca a precio de costo, las ruedas que el mercado le vende a precio de usura. Levanta el volumen de la radio y escuchas que el ministro de economía habla de "tensión de precios" y que es gracias a las intervenciones estatales que todos pueden acceder a lo más básico de sus insumos para trabajar dignamente. Ya has detectado para quien será el sexto plomo.

Antes de ingresar a tu departamento, observas que el encargado platica con un hombre que parece su hermano, un Mercedes Benz en la puerta te hace sospechar que se trata de alguien importante, el encargado te presenta al interlocutor, es el líder del sindicato de encargados de edificios, quien jocosamente te dice; "que pasó con las vaquitas papito". Le dejas el séptimo y octavo regalo y lo depositas a un eterno descanso al lado de su opulento vehículo. Sales corriendo ante la atónita mirada del conserje, pasas la noche en un hotel de baja calidad en constitución, prendes el televisor y ves el revuelo en la puerta de tu edificio. El encargado habla de ti, dice que eres una persona buena, de trabajo, que hacías chistes, que todas las mañanas te ibas con las alpargatas a tu campo a trabajar, que volvías cansado pero siempre de buen humor. También indica que solo te habían hecho una broma por las vacas que habías perdido, pero que no era para tanto...

Los periodistas se preguntan qué habría de pasarle a un hombre común que se vio empujado a semejante actitud. Pasan las publicidades y en el bloque siguiente se repite el discurso presidencial en medio de un día de tensiones en el aeropuerto. La presidente indica que; "...vamos a ser duros con los que no comprendan que la dignidad del pueblo argentino está por encima de intereses particulares..." Casi sin querer, mirando el espejo enmohecido de la modesta habitación, te ves con el arma en la mano, agitado, mirando el televisor y compenetrado con el discurso. Súbitamente tomas consciencia de dos cosas; el destino de aquella última bala y la metamorfosis kafkiana que transformó a un ciudadano común en un asesino serial.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Aerolíneas Argentinas da FAMA a una nueva estrella

¿Quién hubiera pensado que un marxista de pura cepa como Axel Kicillof apuntalaría su gestión sobre características de racionalización empresaria de ajuste a ganancias mediante el rendimiento marginal del capital? -forma tan odiosamente odiada por el marxismo clásico- ¿Y qué decir si el mismo muchacho hace responsable de tal racionalidad (masticando inconscientemente la realidad que provoca de facto, lo que de hecho esquivó teorizando en sus años de estudiante-investigador) a la naturaleza volcánica?
En su intento de justificar un movimiento que no necesita justificación alguna, sino al contrario, solo ser explicado mediante parámetros objetivos, el gurú Kicillof nos muestra que aún no ha comprendido que racionalizar una empresa no es sinónimo de achicamiento, sino de posicionamiento y mejora: ¿O estará haciendo "fulbito para la tribuna" y nosotros financiando su FAMA? (Fiesta Aérea Monopólica Anti-mercado)


miércoles, 16 de noviembre de 2011

¿Sensación de libertad o profundización del encierro?

Intercambiando opinión al respecto de los seguimientos para comprar dólares, una persona me dijo: “… a mi no me parece mal que se tenga que blanquear para comprar dólares, es un eterno problema que ha padecido Argentina desde siempre, y este gobierno parece encaminar la solución. Si ganas 5000 y tus cuentas declaradas denotan que no podes ahorrar más de 500 dólares por mes, esta bien que no te dejen comprar más”.

A lo que respondí: “pero si tengo ganas de hacerme cargo un preciso mes de comer arroz partido, pagar mis cuentas al mes siguiente, encargándome de costear mis intereses sobre la base de hacer uso de mi libertad de elección -por más que esta me suma en la indigencia provisoria- y, COMPRAR 1200 DÓLARES. ¡No lo puedo hacer! dado que el sistema – en apariencia altruista- me lo prohíbe de facto. Esto es una clara restricción a mi libertad de elegir sobre la base de mis propias acciones conciente de los costos que deberé afrontar por ellas

La persona con quien hablaba hizo unos segundos de silencio y dijo: “La verdad es que tienes razón, no había pensado desde ese lado el punto”. Luego, continuando la conversación, le expliqué como es que las ranas se dejan cocinar a fuego lento sin advertir la adaptación a la temperatura que las llevará a su propia muerte, mostrando la contraparte del ejemplo de otra rana que, tirándola al agua caliente sin previa adaptación salta huyendo despavorida ante el peligro, ante lo cual, mi interlocutor contestó: “¿y esto es precisamente lo que esta sucediendo verdad?". En efecto, indiqué, eso parece estar sucediendo. Con una mirada acompañada de un agudo ceño, lo que dejaba ver que su nivel de concentración se elevaba, preguntó: “¿¡Como es eso del liberalismo que tanto mencionas…?!” Y comencé a sentir que no todo estaba perdido…

miércoles, 9 de noviembre de 2011

LA LIBERTAD SE ABRE CAMINO



Hace 22 años caía el símbolo material de una ideología marchita: el muro de Berlín. Del lado socialista, la imagen que dejó ver aquella tapia derrumbada, no era sino una triste impresión grisácea, una ciudad sin alma, una descolorida melancolía corroída por el paso del tiempo. Sólo La Habana parece empeñarse en conservar aquellas imágenes de decadencia material. Aunque también hay personas que persisten en mantener en respirador ideológico, la frustración de saber ya fenecido aquello que, no pudiendo nunca ser, consideran, podría haber sido... CELEBREMOS UN NUEVO ANIVERSARIO DE LA CAÍDA DEL MURO DE LA VERGÜENZA, CELEBREMOS LA LIBERTAD!!!