Y pensar que estos tres payasos tienen poder para guiar los destinos de mi vida...
¿Cómo llegamos a profanar nuestra individualidad dejando que estas bestias cuiden de ella?
¿Cómo, de que manera superaremos la pobreza con la que se alimenta el poder de estos faraones regionales?
¿Representan fielmente los valores culturales de Latinoamérica estos seres que muestran explícitamente su insaciable voracidad y actúan flemáticamente su própia mentira?
La oscuridad ideológica que corroe a estos apologístas; ¿Podrá ponerles en el camino de la luz, indicando la salida de una caverna que los contiene mañatados frente a sombras de un pasado amorfo?
Muy buenas preguntas
ResponderEliminar